
John Locke sostenía que en el momento del nacimiento la mente es una tabula rasa, o sea, una pizarra en blanco en la que nada hay; todas las ideas se forman a partir de los procesos sensoriales de la visión, el oído, el gusto, el tacto y el olfato. Locke ha servido de inspiración a aquellos psicólogos que subrayan la importancia de los aspectos adquiridos de...